Los hilos aptos, también conocidos como hilos rusos, se han convertido en uno de los tratamientos de rejuvenecimiento facial más demandados del momento. ¿El motivo? Sus increíbles resultados para elevar, estirar y tensar los tejidos faciales que se van deteriorando con el paso del tiempo.
El nombre de hilos aptos proviene de la palabra Antiptosis, es decir, anticaída. Porque ese es el principal objetivo de estos hilos: luchar contra la caída que sufre la piel del rostro a medida que vamos cumpliendo años. La flacidez facial provoca que el rostro parezca más envejecido, más cansado y más deteriorado de lo que en realidad está y estos hilos son la solución definitiva para recuperar el esplendor perdido.